Los investigadores han descubierto por qué los hombres son mucho menos propensos a desarrollar esclerosis múltiple (EM): altos niveles de testosterona. La testosterona desencadena la producción de la citocina IL-33 protegiéndolas de la enfermedad. Los hallazgos del equipo se publicaron hoy en las Actas de la Academia Nacional de Ciencias.
Autor: Laura Mason