Según un estudio norteamericano, la exposición a caproato de 17a-hidroxiprogesterona (17-OHP), prescrito a millones de mujeres embarazadas y con riesgo de aborto en las décadas de los 50 y 60 en Estados Unidos y Europa, aumentó el riesgo de cáncer en la descendencia expuesta, sobre todo si la exposición se produjo en el primer trimestre del embarazo y con una dosis de tres inyecciones.
Autor: Im Médico